Ayer me entretuve buscando en Google algunos de los artículos y entrevistas que han aparecido en la revista KINDSEIN. Los encontré pegados —enteros, con foto y todo— en numerosos blogs y webs que ni enlazan ni citan la fuente.
Algunos de esos blogs sí la citan, pero mal, porque no han copiado la entrevista de KINDSEIN sino de otro blog que a su vez había copiado la entrevista de otro blog que la había copiado de otro blog… y así hasta el infinito.
O sea que el contenido de KINDSEIN (¡y de tantas otras publicaciones!) va pasando de mano en mano, como la falsa moneda, y cambiando de firma, según quién lo haya copiado. Y si KINDSEIN desapareciera, todo el trabajo realizado persistiría en Internet, pero como si lo hubiera hecho otro. Son el tipo de cosas que te hacen acordarte del padre de Internet.
Read the rest of this entry »